Hace más de 2,400 años el padre de la medicina, Hipócrates, reconoció y describió el accidente cerebrovascular como el "inicio repentino de parálisis". En tiempos antiguos el accidente cerebrovascular se conocía como apoplejía, un término general que los médicos aplicaban a cualquier persona afectada repentinamente por parálisis. la primera persona en investigar los signos patológicos de la apoplejía fue Johann Jacob Wepfer y fue el primero en identificar los signos "posmorten" de la hemorragia en el cerebro de los pacientes fallecidos de apoplejía.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario